Por una educación profesional sin prácticas con animales.

El Centro universitario de Ciencias de la Salud (CUCS) junto con el Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias son custionados por seguir recibiendo animales vivos procedentes de algunos Centros de Control Animal y por recoger animales de la calle para su uso como parte de las prácticas médicas y científicas en las áreas de Medicina, Medicina Veterinaria, Enfermería, Odontología y Psicología. Además de ser una clara violación de la Norma Oficial Mexicana (NOM 042 SSA), la práctica es repudiada. Por otra parte, la Universidad de Guadalajara cuenta con un Centro de Alternativas al uso de Animales en la Enseñanza(CAAE) que no ha sido aprovechado.
Los perros que se utilizan para la disección y  práctica de procedimientos quirúrgicos, son capturados en la calle por camionetas que pertenecen a la Universidad o están siendo entregados por terceros que han sido contratados para el mismo propósito. En algunos casos, los perros llevan collares que demuestran que tienen dueños. Otros perros son sustraídos del Centro de Control Animal del cercano municipio de Tonalá, Jalisco. Los animales capturados sufren de tremendo estrés debido a las condiciones a los que son sometidos incluso antes de la práctica %u201Ceducativa%u201D. Todos los animales, incluyendo perros visiblemente enfermos, cachorros y hembras embarazadas, son confinados a vivir en jaulas durante días sin alimento, sombra o agua.

Ha sido a través de fotografías, videos, reportes de vecinos y de las quejas de algunos de los mismos estudiantes profundamente preocupados por la situación, que los métodos de tortura y crueldad extrema que estos animales tienen que soportar han salido a la luz pública, así como las pobres condiciones de higiene de las prácticas que ponen en peligro la misma salud de los estudiantes. Sus testimonios describen el uso de anestésicos y medicamentos expirados que se emplean en dosis más bajas de lo requerido antes de cortar y abrir al animal. El resultado es que los animales no están completamente sedados y con frecuencia recobran la conciencia en medio de la cirugía, lo que les ocasiona un sufrimiento indiscriptible. En muchos casos, los gritos y gemidos de los animales son silenciados con violencia física. Ignorando los responsables las disposiciones legales en la meteria. El llanto significa lo mismo en todos los idiomas. Ayúdanos a terminar con este vergonzoso trato hacia los animales. Firma la petición para poner fin a estos métodos arcaicos de la utilización de animales vivos en las prácticas educativas y hacer una diferencia. Ellos necesitan nuestra ayuda.