Un año más, los montes de Galicia, en el norte de España, están siendo arrasados por el fuego. Un año más asistimos impotentes a la destrucción de miles y miles de hectáreas de bosque con la incalculable pérdida que ello supone en términos ecológicos, de biodiversidad y de paisaje. Y lo peor es que la mayoría de estos fuegos son causados por el hombre, desde locos que actúan en solitario hasta personas movidas por intereses económicos de todo tipo.
El gobierno gallego se lamenta de la situación y ha declarado el estado de emergencia, pero como es habitual, no se había tomado ninguna medida a largo plazo para evitar que volviese a suceder una tragedia como esta.
No basta con lamentarse: hay que tomar medidas drásticas para evitar que los montes de Galicia sigan ardiendo cada año. En primer lugar, es necesario aprobar un plan estratégico de ordenación del monte que potencie un aprovechamiento económico sostenible y diversificado. En segundo lugar, contratando retenes fijos y bien preparados que estén preparados todo el año para combatir el fuego, y que no sean únicamente contratados cuando se producen incendios. Y en último lugar, coordinando a todas las autoridades para perseguir y condenar con más contundencia a los criminales causantes del fuego.
Detengamos la destrucción de los bosques gallegos. Únete a mí y firma esta petición para crear una marea que haga reaccionar a los políticos de Galicia. Con tu ayuda, evitaremos que cada año se repita la misma historia.